"El objetivo del Yoga es la atenuación del yo inferior para que el superior yo real pueda brillar; disminuir el desperdicio de energías en el plano inferior de la existencia, para que el alma pueda manifestarse en lo más elevado". Swami Vivekananda


La práctica de Yoga incrementa la energía vital general, elimina el  estrés, cansancio, contracturas musculares y mala postura. 

Por medio del estiramiento se liberan las tensiones del cuerpo, tomando al mismo tiempo conciencia del cuerpo y de sus funciones internas.

Las posturas tonifican gradualmente los músculos de soporte de la columna y los miembros, logrando la firmeza y estabilidad y corrigiendo los malos hábitos posturales.Por medio de la relajación aumentamos la capacidad del cuerpo de reponer la energía, y liberar las toxinas.La práctica de Yoga logra estabilizar las diversas funciones del cuerpo, logrando un cuerpo firme, fuerte y saludable, desde las funciones más internas hasta las más visibles. La práctica de Yoga logra estabilizar las diversas funciones del cuerpo, logrando un cuerpo firme, fuerte y saludable, desde las funciones más internas hasta las más visibles. 

Cada una de las posturas trabaja sobre los órganos internos, estimulándolos por medio de diferentes presiones suaves, y haciendo circular la sangre desde y hacia dichos órganos. 

El trabajo sobre la respiración, la relajación y las posturas, desarrollan y tonifican el sistema nervioso. Produce un efecto de calma en la mente, ayudando a combatir el estrés y la ansiedad. Equilibra funciones como la digestión, el sueño y la circulación, alteradas por los efectos del estrés.La práctica de Yoga contribuye a encontrar el peso adecuado del cuerpo, por medio de la progresiva regulación de sus funciones internas. El tránsito por el sistema digestivo es estimulado, favoreciendo el mismo.


Estos beneficios se logran por medio de una práctica regular y adecuada; la supervisión y guía de un instructor cualificado es esencial.

"Beneficios de la práctica de Hatha Yoga: el cuerpo se vuelve fuerte y sano; el exceso de grasa desaparece, el rostro resplandece, los ojos centellean y un encanto particular se desprende de toda la personalidad. La voz se vuelve dulce y melodiosa. El adepto ya no es presa de la enfermedad. La digestión se hace con facilidad. Todo el cuerpo se purifica, el espíritu se concentra fácilmente. La práctica constante despierta las fuerzas espirituales latentes, trae la dicha y la paz."
Swami Sivananda